“PEDIMOS PAZ”

Por: Dante Hernández Prieto

El día que se puso la bomba en el Ministerio Público en Trujillo, fue la gota, perdón la explosión que había derramado el vaso de agua de una sociedad aletargada por no decir anómala ante las protestas sociales que se han dado en diferentes partes del país ante las distintas situaciones que venimos sufriendo, siempre hubo indiferencia ante estas o en el mejor de los casos los representantes de la sociedad civil no se unan para convocar a una marcha de protesta que se haga sentir frente a estas situaciones y en especial a la violencia que se veía en la ciudad de Trujillo.

Esta vez fue diferente, a raíz del atentado antes mencionado, los colegios profesionales junto a otras instituciones de nuestra ciudad, se reunieron para coordinar acciones y levantar su voz de protesta a lo cual se unió el alcalde de Trujillo exigiendo al gobierno central acciones concretas y efectivas contra la delincuencia organizada en nuestra sociedad, de lo contrario convocarían a un paro general como medida de fuerza para presionar al gobierno que parece vive en el país de las maravillas, por lo expuesto por la presidenta en el encuentro de Davos (Suiza), donde manifestó que en el Perú hay seguridad y tranquilidad tanto política, económica y social, pidiendo a los participantes en dicho evento invertir en el país ¿Creerá la presidente que los representantes de los países ahí reunidos no están al tanto de lo que ocurre en el Perú?, y si no lo estuvieran, ¿no harían un estudio de riesgo y factibilidad antes de invertir en el país?.

Por su parte el gobernador regional, salió deslindar responsabilidades que según él no le corresponden, y se las achacó a los colegios profesionales y la sociedad civil preguntando en su conferencia de prensa que hacen estos por la seguridad ciudadana ya que tanto lo critican, arremetió también contra en el gobierno central exigiendo la salida del ejercito a patrullar las calles; la pregunta se cae de madura ¿Lo harán con un plan de intervención como ocurrió en El Salvador o Ecuador donde las fuerzas armadas asestaron duros golpes a la delincuencia organizada?, o solo saldrán a pasearse por las calles y no por culpa de ellos, hay que ser claro en eso.

Preguntémonos ¿El estado de emergencia en distintas partes del país ha disminuido los asesinatos y la ola de atentados en negocios y viviendas?, ustedes saben la respuesta, lo vemos diariamente en los medios de comunicación, en el Callao han seguido las extorsiones  y las muertes realizadas por sicarios de bandas organizadas, al igual que en Trujillo considerada hoy en día unas de las ciudades más violentas del país, la otrora cuna de la cultura y fiestas primaverales. ¿Qué está pasando?… “la ciudad la hemos construido nosotros, esta nos da mensajes a través de su infraestructura y organización social, y el tipo gobernantes que tenemos, es el reflejo de lo que somos como sociedad”.

El deslinde con el gobierno central fueron solo palabras, después de reunirse el gobierno regional convoco a una marcha por la paz, que sería encabezada por el gobernador según sus propias palabras, el objetivo era claro bloquear los reclamos de la sociedad ante un gobierno visto como ineficiente y corrupto, basta con ver los índices de aprobación que este tiene, así el paro de protesta, que implicaba exigir al gobierno central logros en la lucha contra la delincuencia organizada, dándole una semana de plazo se convirtió en una marcha por la paz ¿Paz pedida a las bandas delincuenciales?, es decir sacamos nuestras banderitas blancas, perdón son polos blancos y les pedimos tregua. Ya me los imagino riéndose viendo la marcha por la paz por televisión, sintiéndose poderosos ante el estado y la sociedad y claro se bloqueó la protesta contra el gobierno central y continuamos con tranquilidad y seguridad en el país.

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