Juventud bicentenario puede irrumpir y FF AA mandarlos a sus casas

Congreso obligado a preservar gobernabilidad sin cambio de presidente

Por: Amaro Rodríguez S.

Hay intentos por desestabilizar la gobernabilidad por parte de congresistas en su mayoría, que no ven con buenos ojos  a un competidor político  Francisco Sagasti, frente al Ejecutivo, pese a su relativo desempeño y de hacerlo mejor, estaría llevando agua para los molinos del partido  morado.

Con criterio  lógico los congresistas, dirán nosotros le impusimos la investidura de Presidente de la República, pero no ratifica las leyes aprobadas por el Congreso,  se sentirán más defraudados cuando en  consulta al Tribunal Constitucional, sobre leyes aprobadas por insistencia, sean declaradas inconstitucionales, entonces, es momento de medir sus reacciones desestabilizadoras que emprendan los congresistas contra Sagasti.

El escaso tiempo que resta para las elecciones generales cuyo proceso ya empezó, habrá de mantener a los legisladores estar muy conscientes para evitar cualquier intentona golpista para desestabilizar al actual Presidente y reemplazarlo con otro congresista, porque nuevamente motivaría la irrupción en el escenario nacional de la “juventud bicentenario”.

En el hipotético caso de producirse otra intento golpista, protagonizado por el Congreso de la República, para mantener la paz y el orden público en cumplimiento del artículo N°137 de nuestra Constitución, las fuerzas armadas cumpliendo sus funciones evitarán se cometan actos de violencia como las que dejaron dos jóvenes peruano muertos y decenas de heridos.

De persistir la desestabilización atentando contra la gobernabilidad, la FF. AA, asumirían el Poder para completar el proceso electoral con la elección democrática de un nuevo Presidente de la República y congresistas, los actuales congresistas simplemente se irían a sus respectivos domicilios  a llorar su desventura.

Somos demócratas, no alentamos la injerencia de las fuerzas armadas en la vida política nacional como entidad no deliberante, serían los congresistas los que empujarían a las FF AA, que ni siquiera tienen la intención de hacerlo. De cumplirse este nefasto caso se cumpliría el refrán que dice “no hay mal que por bien, no venga”. Un gran mal sería la intromisión de las FF.AA en la política, pero un bien seria no contar con congresistas irresponsables, desestabilizadores,  también sería  un bien para las arcas fiscales, por ahorrar el pago de jugosos sueldos, mas el aguinaldo por fiestas patrias del 2021

Entradas relacionadas

Deja tu comentario