Por: Amaro Rodríguez S.
Perú profundo dio Presidencia a Castillo, lo obliga preparar al pueblo para cambios
Cansados de soportar en cada gobierno desde el Presidente de la República, funcionarios y grandes empresarios, estos últimos pagan protección política para mantener la impunidad, robaron recursos del Estado, para decir como la canción “te lo llevaste todo hasta el poncho y la guitarra”. El pueblo se enfrentó desigualmente, pero con la osadía de luchar con la verdad en la mano, pese a estimarse en no menos de un 15% de ellos que ansiaron el cambio, sucumbieron en una guerra psicológica, ante el amedrentamiento y siembra de terror planificado por la Fujimori.
La decisión de la autoridad electoral, tras la contabilización al 100% de actas, logró evitar mayores suspicacias que enloden su trabajo calificado de bueno por los observadores internacionales, en desesperado intento Fuerza Popular trató de crear supuestas condiciones que desnaturalice el proceso electoral, creando incertidumbre en la ciudadanía para solicitar la anulación de las elecciones, felizmente no prosperó..
Ya es tiempo de erradicar definitivamente la ancestral costumbre de los que se ufanan pocos y dicen, “el vivo (corrupto), vive del zonzo >(honesto) y el zonzo de su trabajo”. Con el poder concedido por voluntad popular a Pedro Castillo, está obligado de preparar al pueblo para el cambio gradual, pero de ninguna manera con improvisación.
PUEBLO PREPARADO ASEGURA CAMBIOS
Para que las decisiones políticas que tome el Presidente Pedro Castillo, en intento de iniciar cambios positivos, que repercutan en el bienestar del pueblo peruano, es obligación contar con un pueblo con mentalidad positiva, con trabajo disciplinado, honesto y respeto de la leyes, en esas condiciones, si podemos iniciar el cambio que se propone el nuevo régimen por encargo del Perú profundo, es oportunidad de demostrar que si somos capaces.
La historia nos recuerda de las buenas medidas para el campesinado nacional, tomado por ex Presidente Juan Velasco Alvarado mediante la reforma agraria, que experimentó un fracaso, los agricultores no estaban preparados para ese cambio, la producción y productividad disminuyeron.
Los grandes cambios en políticas socialistas se lograron con fuertes medidas, la revolución rusa de la ciudad al campo, por la imposición desde el gobierno de una férrea disciplina laboral, convirtió a Rusia en una potencia por décadas y primer país en conquistar el espacio, mientras que la revolución china para cambiar a su pueblo en el proceso revolucionario del campo a la ciudad, realizó la revolución cultural y ahora por el empuje productivo del pueblo chino, es una gran potencia mundial.