La adquisición de un “inmueble de segunda” se puede convertir en una atractiva opción con el fin de hacer realidad el sueño de la casa propia a un menor costo. Sin embargo, siempre es importante considerar aspectos para evitar que el proceso se vuelva una pesadilla. “Invertir en un inmueble es una decisión que debe ser tomada con precaución, pues es donde viviremos el resto de nuestra vida o por mucho tiempo”, indicó María Ramos, directora de la carrera de Arquitectura de la Universidad Privada del Norte.
Para la especialista en arquitectura, debemos ver las ventajas y desventajas antes de realizar la compra, haciendo énfasis en los costos del mercado y los posibles cambios que pueda necesitar el inmueble. Espacios como el baño y la cocina son los que pueden requerir mayores arreglos, al presentar posibles filtraciones o necesitar mantenimiento eléctrico. Asimismo, se debe verificar el estado de los muros, los techos, los pisos, las puertas y ventanas para garantizar la seguridad de la vivienda.
Finalmente, debemos procurar encontrar inmuebles con adecuada especialidad y funcionalidad con el objetivo que las remodelaciones sean menores y el ahorro sea mayor. La propiedad debe contar con una vista atractiva en las zonas sociales, ventilación e iluminación apropiadas y documentación en regla, agrego María Ramos, directora de la carrera de Arquitectura de la Universidad Privada del Norte.
