Las transferencias de recursos a los gobiernos subnacionales (regiones y municipios) por los distintos tipos de canon de las actividades extractivas (minería, hidrocarburos, pesca, hidroeléctricas o actividades forestales) no son bien invertidas. En los últimos 10 años, en promedio, las regiones han dejado de utilizar el 40% de estos recursos que reciben.
El 54% de todos los recursos se destina a las municipalidades distritales. Para cambiar esta situación es necesario cuestionar esta fórmula. Se podrían transferir parte de los recursos de las municipalidades a fideicomisos para centralizar la gestión.
Unos podrían realizar las inversiones a pequeña escala a favor de las comunidades, y otros gestionar las obras estratégicas de conexión o desarrollo productivo a nivel regional, señala la Asociación de Contribuyentes del Perú.