Exigirá desde el Congreso que normas a su favor se cumplan
Fiscalizar el cabal cumplimiento de las normas que ya hay a favor de las personas con discapacidad para mejorar sus condiciones de vida, pero no se respetan, exigirá Luis Valdez Farías, candidato en La Libertad al Congreso con el N° 1 de Alianza Para el Progreso (APP).
“Hay leyes que no se cumplen, como que ocupen el 3% del total del personal que hay en las instituciones del Estado o incluir en nuevas construcciones o infraestructura pública espacios de accesibilidad para facilitar su desplazamiento, por ejemplo, las rampas”, señaló.
Vamos a incidir, dijo, en la obligación de que las instituciones donde están trabajando los capaciten o que les permitan actualizar su profesionalización para adaptarse a las demandas y necesidades reales del sistema y laboren casi en similares condiciones que sus compañeros.
Muchas veces están no solo en desventaja física sino también en conocimientos y eso es algo que se debe terminar para lograr una integración laboral y no sientan que entraron a trabajar solo por un tema de humanidad.
“Es necesario cambiar el paradigma que entiende la discapacidad como una carga. Desde el Congreso velaremos por la necesidad de atenderlos, de eliminar las barreras que tienen y empoderarlas para que gocen de todos los derechos del ser humano”, acotó.
Ellos no son menos o están disminuidos. Más que un prejuicio o estigma, la discapacidad debe ser enfocada como un problema del que nadie está libre, propiciando una sociedad más inclusiva y justa, puntualizó, reconociendo que hay pequeños avances en esa lucha, pero no son suficientes y se necesita que el Gobierno Nacional atienda realmente su problemática.
La discapacidad es multicausal, puede ser de carácter congénito, físicas, psicológicas o sensorial. Esta se produce también por accidentes o avanzada edad y cuando eso ocurre se genera un trauma, se sienten menos, ven disminuidas sus posibilidades de integración educativa, laboral o social porque tienen problemas de inserción o de desplazamiento.
Existe aún de parte de empleadores un prejuicio hacia las capacidades potenciales de la persona con discapacidad, lo que limita su integración laboral. Las limitaciones en su desplazamiento, para ver, escuchar o comunicarse siempre conducirán a discriminación, menor desarrollo y mayor riesgo de caer en pobreza por la falta de oportunidades laborales.
Por eso es indispensable que desde el Congreso se exija el cumplimiento de las normas a su favor y que gocen plenamente de todos los derechos humanos y libertades que han ganado en el tiempo y no se cumplen, remarcó el candidato.
Quienes tienen una discapacidad no son sujetos de caridad sino personas con todos sus derechos. El Estado tiene la obligación de atender su rehabilitación y reinserción social y laboral. La discapacidad no debe generar un problema. El entorno debe contribuir a su integración y desarrollo, a la igualdad de oportunidades de quienes la padecen, sostuvo finalmente Valdez.