Por: Amaro Rodríguez S.
El avance del Covid 19 en el Perú hoy día jueves 23 de abril, alcanzó los 19,250 casos positivos, aún al parecer no hemos alcanzado el pico para aplanar el avance y nos ubica como un país peligroso para nuestra población en el penoso cuarto lugar, entre las 35 naciones soberanas de América, tras EE.UU de América, Canadá y Brasil.
La evidente realidad nos obliga a prolongar la cuarentena, que seguirá en forma acelerada afectando a las grandes mayorías que habrían agotado sus recursos económicos para alimentarse y mantenerse en condiciones saludables, lo que haría presagiar una escalada de descontento motivado por la escases de dinero para adquirir los productos de primera necesidad.
Ante la necesidad de producir bienes y servicios, en un plazo casi inmediato, en particular óptica sería muy oportuno levantar la cuarentena en provincias y regiones que no registren casos positivo, o aún cuando haya solo un caso, que bien pudiera ser controlado por los responsables de los centros de salud exigiendo un riguroso aislamiento y control a personas que ingresen procedentes de otras regiones o provincias.
Se necesita activar y estimular la fuerza laboral, por realizar trabajos de campo para cultivar los productos indispensables para alimentar a la población de las ciudades, donde la pandemia se ensaña por errores de la población, por falta de los medios materiales oportunos que impidieron la inmediata aplicación de pruebas rápidas y conocer los casos positivos, para su aislamiento. Esto no ocurrió y el resultado es el masivo contagio para convertirnos en cuarto país de América con el mayor número de casos positivos.
El letal Covid 19 ha generado un éxodo de una población que perdió su puesto de trabajo, sobre todo en Lima donde grupos de centenares de nuestros compatriotas en uso de su natural derecho a la sobre vivencia, emprendieron épicos éxodos con dirección a su terruño en diferentes regiones de costa sierra y selva del Perú, para reunirse con sus familiares y encontrar algo, para paliar el hambre.
Mientras tanto los Gobernadores en coordinación con los alcaldes velarán y apoyarán con recursos logísticos, para que las autoridades de Salud a nivel regional, provincial y distrital cumplan con la implementación de las estrategias destinadas a frenar el avance de este letal virus, que agobia a la humanidad y preocuparse de contar con camas disponibles para recuperar a pacientes, antes de preparar fosa comunes, como nefastamente se anunció en La Libertad.